viernes, 12 de diciembre de 2008

la puta

Los escritores no combaten entre ellos. Se saben viajeros de un mismo artefacto que cada uno impulsa a su manera. El objetivo, ir un paso más allá que los que vinieron antes. Los que no reman con ese objetivo combaten por imponer su rumbo, como si no fuera uno y único el rumbo. Pero está bien, a mí sólo el fracaso me ha librado de esas batallas. La vanidad es realmente astuta y engatusadora, el último recurso del ego para enmascarar su efimeridad, y puede que sólo el fracaso nos permita liberarnos. Aunque puede que el fracaso sea otra máscara de esa puta.

viernes, 5 de diciembre de 2008

intelectualismo floral

El viaje hacia dentro -el viaje a ninguna parte- no conviene alargarlo mucho. Está bien llegar hasta los límites del concepto, pero seguir más allá con el absurdo "conócete a ti mismo" es la más estúpida de las condenas.
Yo sería un físico que no hubiera dividido jamás el átomo, aún pudiendo. Una vez descubierto que Dios sí juega a los dados es absurdo intentar establecer la probabilidad de su próxima jugada. Es más honesto admitir la incertidumbre y crear, aunque creemos con la certeza de que quizás los castillos que alzamos sean castillos de mierda.