jueves, 12 de septiembre de 2019

teoría para después del principio

Cuando uno no duerme ve que todo no es sino conflicto, que el desacuerdo, la imposibilidad o la duda están ahí donde estás. Por lo mismo, si no se ve, o se duerme o ya no estás. No hablo de guerra, ni de lucha, ni de combate, hablo de vivir con uno y de vivir con los otros, hablo -porque, se me nota, soy un hablador- de mantener al cabestro bien ligado, aunque cabestros sean los que se aproximen. Hablo de la sorpresa ante uno y de la curiosidad ante el otro, del quién soy y del quién es, y del quién somos nosotros y, también, por supuesto, del cómo vamos a hacer para ponernos de acuerdo aunque el desacuerdo, la imposibilidad y la duda, ya está dicho, siempre está... si no duermo, si estoy.

viernes, 6 de septiembre de 2019

la epopeya de vivir en Barcelona sin un cuchillo entre los dientes

Me dicen que vivir ahora en Barcelona es más peligroso que, como me decían entonces, hacerlo en los 90 en Medellín o el País Vasco. Me dicen que si hablas en castellano te apalizan y que si subes en el metro o paseas por una de sus calles te van a matar. Me dicen que la histeria se ha desatado y que reina el miedo y la violencia, que todo es odio y temor, sospecha y desesperanza. Me dicen todo eso a mí, que nací y sigo creciendo aquí, los que narran qué es lo que sucede. Pero ya saben que lo que sucede nos sucede a todos, también a mí, y les digo y les juro y les super juro y les super mega juro que lo que sucede ahora es lo mismo que ha sucedido en los últimos cincuenta años, cuando Barcelona ya era lo que es hoy, una ciudad viva, que vibra, que ruge, que aprende. Y, por cierto, los que narran son también los mismos que narraban entonces a Medellín o el País Vasco, pero yo no vivía allí para evidenciar que los que narran, mienten, y hay una alta probabilidad que también lo hicieran entonces.