jueves, 1 de octubre de 2020

la noche sin parafernalia tras otro día logrado

En la plaza la muchedumbre urde su plan, y en los despachos, otras muchedumbres, el suyo. Se necesitan pancartas -gritan unos y otros- lemas, proclamas que hinchen pectorales. Hay que mantener vivos los corazones, piensan todos, porque la noche está al caer, y con ella, otra vez la realidad, y otra vez el deseo de libertad, ese que durante el día parece satisfacerse en todos los gritos y que, a oscuras, asume que todo no era más que farsa, la misma farsa de siempre.

3 comentarios:

José L. Solé dijo...

Por la noche todos las gatos son pardos... y farsantes.

jordi lobo dijo...

Y me da que también por la mañana, y por la tarde

Salut!

Por cierto, sigo transitando su calle, que luce como siempre... afortunadamente

José L. Solé dijo...

Gracias, Sr. Lobo. Nos leemos por las esquinas de la ciberblogalaxia.
Cuídese ;-)