martes, 15 de octubre de 2013

confesión clara con un oscuro y sobrevenido desenlace

Escribir complejo porque no se sabe escribir fácil, eso merece la absolución. Escribir complejo porque utilizamos este arte para simular enjundia, profundidad, calado, eso merece el desprecio. Yo me absolví durante mucho tiempo con la excusa de la búsqueda de una forma, un estilo, una manera de decir única e intransferible. En realidad disfrazaba mis frases como si fueran a camuflarse en una falsa jungla con unos falsos habitantes, y hoy quiero dejar de hacerlo, y escribir, por ejemplo, que la voluntad es más fuerte que la naturaleza, y que una excusa sólo demuestra cuan lejos estamos de saberlo (si esto es complejo, lo es por incompetencia, lo juro).
Es decir, dejad de compadeceros, o haced lo que os dé la gana, si os gusta miraros sollozando ante el espejo. A mí no.  

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