domingo, 14 de febrero de 2010

imperativo categórico

Quiero contar lo que siempre se cuenta, pero como nadie antes que yo lo ha hecho. Eso hace un escritor. Cuando agarro mis bártulos (una libreta, un pilot 0.5 negro (intento espabilar a mis personajes, a ver si despiertan fuera del portátil), tabaco pueblo, filters OCB, papel corto OBC azul, algo de música) la nada de la página en blanco se pone a temblar.
Nosotros, los que escribimos, nos hemos conjurado para llenar cada uno de los huecos con los que el misterio se muestra. Mi deber como escritor (a eso me obligo) es construir la pieza que me corresponde.

1 comentario:

drfloyd dijo...

y a veces escribir en el blanco sin mover el boligrafo o el teclado, para a veces llegar al desastre de mancharlo con tinta y descubrir que la escena se nos escapa.
Escribe y fuma Lobo, que las quimeras te sean favorables.